Pequeños gestos, grandes efectos.
Aquí encontrarás tips diarios para llenar tu día de intención, energía y magia práctica. No necesitas grandes rituales ni ingredientes exóticos: basta una pizca de consciencia, algo que tengas a mano… y el deseo de vivir con más conexión.
Cada tip es una semilla. Úsalo como protección, impulso, belleza, limpieza o atracción. Algunos duran un instante, otros te acompañan todo el día. Todos están pensados para ayudarte a caminar más fuerte, más liviana, más tú.
Este es tu rincón de trucos, fórmulas y susurros embrujados.
por Embrujada
*Todo lo invisible también busca su visita.*
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© 2025 Embrujada by Esther. Magia cotidiana con amor y verdad.
Toque de calma con lavanda
A veces el cuerpo pide pausa, aunque no lo diga. Este tip es perfecto para esos días donde todo va demasiado rápido o te sientes un poco desconectada de ti misma.
¿Qué hacer?
Añade unas gotitas de aceite esencial de lavanda a tu crema corporal habitual o a tu gel de ducha. No hace falta complicarse: unas 2 a 3 gotas bastan para transformar un gesto cotidiano en un pequeño ritual de calma.
¿Qué aporta?
La lavanda es conocida por sus propiedades relajantes y equilibrantes. Su aroma no solo suaviza la piel, también calma la mente, reduce la tensión y te envuelve con una sensación de bienestar sutil pero profunda.
Cuándo usarlo:
Después del gimnasio, al final de un día agitado, o justo antes de dormir. También en esos días donde sientes que no te alcanza el tiempo y necesitas volver a ti, aunque sea por un instante.
Un gesto sencillo… que huele a paz.
Con cariño, Embrujada
Despertar con intención
Nada más abrir los ojos, antes de mirar el móvil o lanzarte al día, regálate un instante para ti. Este pequeño gesto marca la diferencia entre dejar que el día te arrastre… o elegir cómo quieres vivirlo.
¿Qué hacer?
Abre la ventana, aunque sea un poco. Deja que entre el aire, la luz o simplemente el sonido del mundo. Respira profundamente tres veces y, con voz clara o en silencio, repite:
“Hoy elijo vibrar en calma, alegría y gratitud.”
Por qué funciona:
Es una declaración. No se trata de negar lo difícil, sino de anclarte en lo que sí puedes elegir: tu vibración, tu actitud, tu mirada. Al decirlo, despiertas algo dentro y le das dirección a tu energía.
Hazlo incluso si tienes prisa, si no dormiste bien o si el día parece venir torcido. Este ritual breve no necesita tiempo… solo presencia.
Recuerda:
Lo invisible también hace efecto. Y todo empieza en ti.
Con cariño, Embrujada
Mini Ritual de introspección en luna menguante
Este gesto sencillo es ideal para acompañar procesos de soltar, perdonar o reencontrarte contigo misma. La luna menguante te invita a mirar hacia dentro, sin juicio, solo con presencia.
Materiales:
- Una vela blanca
- Un espejo
Paso a paso:
- Enciende la vela blanca en un lugar tranquilo.
- Coloca el espejo frente a ti y siéntate en silencio.
- Mira profundamente tus propios ojos, sin apuro ni expectativa.
- Repite en voz baja o mentalmente: “Reconozco mi luz y mi sombra.
Acepto cada parte de mí con amor y compasión.
Hoy me libero de lo que ya no necesito y abrazo mi verdadera esencia.” - Permanece unos minutos respirando, dejando que la calma y la claridad te atraviesen.
Este ritual no requiere luna llena ni grandes ceremonias: basta con la voluntad de mirarte de verdad. La magia está en lo que te permites ver.
Con cariño, Embrujada
Cómo Limpiar y Preparar tus Velas Antes de un Ritual
Una vela no se enciende sin alma. Antes de usarla, hay que despertarla.
1. Limpieza energética
Las velas absorben energía desde que se fabrican. Antes de usarlas, límpialas así:
Pásalas por el humo de un incienso purificador (como salvia, copal o sándalo).
Frótalas suavemente con un algodón mojado en agua con sal, agua de luna o agua florida.
También puedes usar un algodón con alcohol si no tienes otra cosa.
2. Ungir con intención
El aceite activa y enfoca el propósito de la vela.
Elige uno según el ritual (por ejemplo: rosa para amor, romero para claridad, canela para prosperidad).
Pon unas gotas en tus dedos y úntala así:
De la mecha hacia la base → si quieres atraer (porque traes la energía hacia ti).
De la base hacia la mecha → si quieres liberar o alejar (porque empujas la energía hacia afuera).
Mientras la unges, visualiza tu intención como si ya se hubiera cumplido.
3. Activación final
Coloca tus manos sobre la vela unos segundos.
Di en voz alta o en tu mente:
«Despierta, portadora de luz. Que tu llama me guíe y me proteja.»
Ya está lista para acompañarte en tu magia.
La magia está en tu intención, no en los objetos
No hace falta tenerlo todo perfecto para que un ritual funcione. Lo más poderoso es tu intención, tu energía, tu fe en lo que estás haciendo.
Si te falta un material, se puede sustituir:
¿No tienes la vela del color exacto? Usa una vela blanca, que sirve para cualquier propósito.
¿No tienes la planta que pide el ritual? Usa romero o laurel, que son plantas muy versátiles.
¿No tienes la piedra indicada? El cuarzo blanco o amatista son piedras que cubren muchas funciones.
¿No tienes aceite esencial? Puedes usar una infusión, un aceite casero o simplemente visualizar el aroma.
Haz magia con lo que tienes. Lo importante no es el objeto, sino lo que despierta en ti.
Cierra los ojos, respira profundo y recuerda:
la herramienta más poderosa eres tú
Con cariño, Embrujada
Tip mágico exprés
Prepara un baño de pies con agua tibia, una cucharada de sal gruesa y una pizca de canela en polvo. Sumérgete durante 10 minutos. Este ritual limpia suavemente las energías que no son tuyas y te enraíza de nuevo en tu cuerpo, devolviéndote a tu centro.
Avanza con luz y con raíz.
Con cariño, Embrujada